Albert Luque, suspendido de sus funciones como director de la selección española
La Federación, como ha indicado en el comunicado oficial en el que asegura que llegará hasta el final para depurar responsabilidades, y para lo que realizará una auditoría sobre cualquier tipo de contrato firmado en la época de Rubiales que pueda estar bajo sospecha, ha tomado también otras acciones para limpiar su imagen.
Sin obviar la presunción de inocencia de sus todavía dos trabajadores, Luque y Rivera, ha decidido apartarlos de sus respectivos cargos mientras duren las investigaciones y se resuelva todo el lío judicial.
Ha sido la Comisión Gestora, presidida por Pedro Rocha, la que ha tomado esta determinación, del mismo modo que hizo cuando estalló la denominada operación Brody y cortó la relación con aquellos implicados que fueron incluso detenidos.