Ana Peleteiro, campeona de Europa de triple salto; Attaoui, subcampeón de 800 metros
La gallega, que hizo un parón en el atletismo para convertirse en madre, ha vuelto mejor que nunca, superando cualquier obstáculo que se le haya puesto por delante en los últimos meses para reinar en Roma y subirse a lo más alto del podio.
Era la gran favorita del triple salto y lo demostró cuando debía hacerlo. Comenzó con un 14.37 m, al que siguió un 14.46 m, para concluir los tres primeros saltos con 14.52 metros. En la mejora, en su cuarto intento, brincó hasta los 14.85 m, su segunda mejor marca de siempre, sólo dos centímetros menos que la que le dio el bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Con ese subidón, intentó arriesgar aún más por si llegaba su récord personal y se acercaba a esa barrera de los 15 metros, pero hizo nulo. Y luego, una vez que todas sus rivales ya habían saltado sin que la superasen, ya como campeona de Europa cerró el concurso con unos más modestos 14.47 m.
Es la primera medalla de oro de la delegación española en este Europeo. Un subidón en una jornada dominical que también vio minutos antes del triunfo de Ana Peleteiro a Mohamed Attaoui proclamarse subcampeón de Europa de 800 metros. Una carrera en la que otros dos españoles, Álvaro de Arriba y Adrián Ben, fueron cuarto y sexto, respectivamente.