Pérez estableció la nueva estratosférica marca batiendo el anterior, en propiedad de la peruana Kimberly García, en 29 segundos para dejarla en 2 horas 37 minutos y 15 segundos. Fue en Podebrady (República Checa), en el Europeo de Marcha por equipos que, por supuesto, ganó España.

"Fue una sensación muy bonita terminar la carrera y el tiempo, una gran recompensa", dijo Pérez. "No pensé en ningún tiempo ni en ningún objetivo especial antes de la salida, sólo quería terminar lo mejor posible. Así que el récord de tiempo no era mi objetivo. Estoy contenta de haberlo hecho lo mejor posible y me alegra ver que la marcha atlética puede ser atractiva y atraer a tanta gente".

La medalla de oro de Pérez nunca estuvo en duda desde los primeros 200 metros de la carrera y se paseó como si estuviera en casa para eclipsar al resto de rivales, que llegaron a más de ocho minutos. De hecho, tras un parcial de 9:35 en los 2 km, aventajó a muchos de los hombres en la salida de la carrera combinada. En el kilómetro 4, Pérez estaba superando a algunas de las últimas corredoras.

Perseguidoras, a un mundo

Perseguían a la española sus compañeras de equipo Raquel González y Cristina Montesinos, además de la italiana Federica Curiazzi, que a los 6 km estaban a 47 segundos. Una vuelta más tarde era de 59 segundos y fue aumentando hasta ampliarse prácticamente en cada una de las 28 vueltas restantes. Todas las demás estaban a más de dos minutos.

Pérez llegó a los 10 km en 46:17 - 1:31 por delante de sus dos compatriotas - con Curiazzi descolgándose siete segundos. En el kilómetro 19, la líder había doblado a Curiazzi, cuarta clasificada. A continuación, recorrió los 20 km en 1:30:59, un tiempo que la habría colocado sexta en la prueba femenina de 20 km de Podebrady, y un kilómetro más tarde había superado a todas las corredoras

"He pasado temporadas difíciles y me centré en esta competición muy seriamente", añadió Pérez. "Hemos trabajado la técnica y quería demostrar que estoy bien preparada. La técnica aún no era la mejor, pero estoy trabajando en ello. Será incluso mejor (en el futuro)".

Esa es la mentalidad para superar las descalificaciones que sufrió tanto en el Europeo como en el pasado Mundial. A sus 27 años tiene margen de mejora… y un récord del mundo en su palmarés.