El Unicaja de Málaga está en Singapur con un objetivo: traer a España la Copa Intercontinental. El buen rendimiento de la pasada temporada -campeones de la Champions League, lo cual dio el billete para este torneo- y la mejora de una plantilla que ya ofrecía garantías de por sí son los principales argumentos que tiene el equipo dirigido por Ibon Navarro, que recientemente le endosó un duro 102-69 al Saski Baskonia en el Torneo Costa del Sol.
Hay pocas diferencias entre el plantel que llegó a las semifinales de la pasada edición de la Liga Endesa, e incluso el que sorprendió en Badalona al ganar la Copa del Rey, y el que aspira a seguir dando alegrías al abonado del Martín Carpena en esta temporada 2024/25. La ilusión alcanza límites insospechados en la ciudad andaluza y la tardía incorporación de Olek Balcerowski, flamante campeón de la Euroliga con Panathinaikos, no ha hecho sino reforzar esa sensación de euforia.
El primer examen que tiene el Unicaja es ante el Petro de Luanda (África), un encuentro que se celebrará este jueves a partir de las 14h00 CET. Un día después y sin cambiar de horario, los verdes medirán fuerzas con el Al-Riyadi Beirut (Asia). En caso de vencer por partida doble, como se prevé, tendrían asegurado el billete a la final; si sólo ganan uno de esos dos compromisos, entonces habrá que esperar a la situación de sus dos compañeros de grupo.
En el caso de que los pronósticos se cumplan, el conjunto de la ACB y el G League United (América del Norte) deberían pelear por el oro en la jornada dominical (desde las 13h00). Los estadounidenses cuentan con una plantilla muy joven -sólo dos miembros alcanzan los 30 años, uno de ellos el mexicano Juan Toscano- y tendrán que lidiar con el Quimsa (Sudamérica) y el Tasmania JackJumpers (Oceanía).