Borja Iglesias vive los momentos más felices de su carrera deportiva. Le ha costado llegar a donde está, pero a sus 29 años le ha llegado el premio de una convocatoria con la selección española. El máximo goleador nacional en LaLiga -seis goles en seis partidos- espera impaciente su probable debut. 

"Vengo a disfrutarlo, a aportar lo máximo que pueda e intentar aprender. Es una experiencia que no todos viven a pesar de que trabajamos para ello, y estoy muy feliz de poder ayudar en lo que pueda", ha comentado el 9 del Betis a los medios de la RFEF.

Su felicidad es tal que no tiene tapujos en reconocer que "tengo ganas de ponerme la camiseta, escuchar el himno, compartir momentos, estoy muy emocionado, la verdad. Cuando vas cumpliendo etapas te das cuenta de la dificultad que tiene estar aquí. Es un orgullo, un premio". 

Luis Enrique, su valedor; Torres, su ídolo

El seleccionador nacional coincidió con Borja Iglesias cuando dirigió al Celta de Vigo. Desde entonces, el ariete lo tiene en gran consideración. "El recuerdo que tengo es que siempre me hizo sentir como uno más, muy cercano. Luego, es verdad que era difícil participar, yo era joven. Pero es un recuerdo especial, bonito", ha señalado.

De bien nacidos es ser agradecido y también Borja, en un momento feliz, se ha acordado de Fernando Torres, uno de sus grandes ídolos y del que intentaba imitar movimientos. "Me gustaba fijarme en los delanteros de distintos estilos porque me nutría mucho. Con Fernando Torres he tenido como ese idilio, me gusta mucho desde siempre. Y luego coincidía que iba mucho a Santiago de Compostela porque su mujer es de allí y fue el primer jugador profesional que yo conocí en persona. Desde entonces, he coincidido con él y siempre me ha tratado muy bien y ha sido muy cercano. Ahora intercambiamos mensajes y estoy muy agradecido de cómo me trata".