China disputará su primera final desde 1994, cuando cayó ante Brasil, también en Sídney.

El sábado contará con el apoyo del Superdrome debido a la importante diáspora china que vive en Australia.

En la semifinal de este viernes la local Ezi Magbegor falló sobre la bocina el lanzamiento que hubiera llevado el duelo a la prórroga.

En cabeza hasta los últimos cinco minutos, China se vio por detrás tras una canasta de Steph Talbot (51-53, 4 min 42 por jugar).

Las locales tuvieron entonces dos posesiones para situarse con cuatro puntos de ventaja.

Pero en la segunda Wang Siyu robó el balón a Talbot y Huang logró el empate a 46 segundos del final (59-59).

A continuación Cayla George falló su tiro y Wang Siyu acertó con dos tiros libres (61-59) tras una falta de Samantha Whitcomb quizás innecesaria porque Wang parecía en mala posición para lanzar cuando solo faltaban tres segundos para el final.

Si Wang fue la figura desequilibrante, a China la sostuvo su gran pívot Han Xu (2,05 m) con 19 puntos, 10 rebotes y cinco tapones.

Antes Estados Unidos continuó con su paseo triunfal, en un partido prácticamente decidido en el primer cuarto (27-7), en el que Estados Unidos se situó 15-0 antes de recibir su primera canasta a los cinco minutos de juego.

"Parece que fue fácil, pero nosotras hicimos que fuera fácil. Hemos insistido al principio, queríamos poner el listón alto para el resto del partido, hay que hacer lo mismo mañana", señaló la capitana estadounidense Breanna Stewart.

Fue la mayor diferencia (40 puntos) en una semifinal de un Mundial, superando los +36 que logró también Estados Unidos ante España en 2010.

La seleccionadora estadounidense Cheryl Reeve pudo gestionar el tiempo de juego de su triplete estelar; Stewart (17 pts, 4/5 en triples), A'ja Wilson (15 pts, 12 rebotes) y Alyssa Thomas (10 pts con 100% de acierto).