Pogacar consiguió una impresionante racha de victorias en el Tour de Flandes, la Amstel Gold Race y la Flecha Valona, y era el gran favorito para ganar la Lieja-Bastogne-Lieja en abril, pero se cayó en esa carrera y se fracturó la muñeca.

El bicampeón del Tour había planeado una pausa de cuatro semanas después de la Lieja-Bastogne-Lieja y, aunque sus preparativos se vieron desbaratados, sigue siendo optimista sobre sus posibilidades de optar a un tercer título.

"Se puede decir que ha ocurrido en el momento perfecto", declaró Pogacar al diario National de los Emiratos Árabes Unidos. "Naturalmente, no quería que sucediera así, pero me esperaba un largo descanso y supongo que la lesión me obligó a descansar un poco más".

"Volví a entrenar en pista cubierta una semana después de la caída. Así pude mantener un poco mi forma física y también estuve haciendo rehabilitación en la muñeca y algo de carrera, trabajo de core, etc.".

"Ya llevo unas semanas de vuelta y me encuentro bastante bien. No debería perjudicarme demasiado para la gira", añadió en la entrevista publicada el jueves.

Tras haber optado por perderse su habitual puesta a punto en la Vuelta a Eslovenia, Pogacar afrontará el Tour de Francia del 1 al 23 de julio con sólo dos días de competición en los Campeonatos Nacionales de Eslovenia, que comienzan el jueves con la contrarreloj.

Pogacar, que ganó el Tour en 2020 y 2021, se perdió por poco un tercer título consecutivo después de ser derrotado por el danés Jonas Vingegaard (26) el año pasado.

"(Estoy) bastante emocionado. Ha sido una preparación poco convencional con la lesión en la muñeca, pero ha sido muy buena en general", dijo Pogacar. "Es una preparación intensa, pero es lo que toca. Estoy disfrutando del proceso.

"Tenemos un gran equipo y nos entendemos bien. También habrá competidores fuertes, así que no será sencillo, pero lo intentaremos".