Su actuación en esta etapa inicial fue espectacular: se escapó del pelotón a 50 kilómetros de la meta y el escalador del DSM terminó imponiéndose en la meta a su compañero Frank van den Broek, con apenas cinco segundos de ventaja sobre el grupo de favoritos, que no consiguió alcanzar finalmente a los dos destacados.

En un final emocionante, ambos resistieron los ataques y el neerlandés brindó el triunfo de etapa a su líder al término de una jornada disputada con altas temperaturas y que fue un calvario para numerosos corredores, aunque sin afectar demasiado a los principales favoritos.

Es la cuarta victoria parcial de Romain Bardet en un Tour, carrera en la que llegó a terminar segundo de la clasificación general en 2016 y 2017. Sin embargo, nunca había conseguido vestir el maillot amarillo hasta ahora.

Esta edición debe ser la última de su carrera, ya que hace unos días anunció que tiene pensado retirarse en junio de 2025.

Este inicio era muy duro para ser la de apertura de una gran ronda y el calor lo dificultó todavía más en la travesía del pelotón y de los escapados desde Florencia hasta Rimini, en la costa del Adriático. También se pasó por San Marino, que se convirtió en el 13º país extranjero que visita el Tour de Francia en su historia.