El Celta naufraga ante el Valladolid bajo el diluvio pucelano (4-1)
El Celta acudía al José Zorrilla en medio de una muy mala racha en la que solamente había podido puntuar en uno de sus últimos cinco partidos (la victoria ante el Betis en Balaídos). No es que al Valladolid le fueran mucho mejor las cosas, porque llegaban a la jornada 10 de LaLiga rondando los puestos de descenso, con lo que se trataba de un duelo muy importante para cambiar la inercia del equipo que consiguiera la victoria.
La suerte sonrió a los blanquivioletas primero. Tras un dominio de los gallegos al inicio del choque, los de Pacheta en su primer disparo del partido. En una jugada de estrategia, todo el Celta pensaba que una falta en la banda derecha del ataque pucelano botada por Álvaro Aguado acabaría en un centro al área. Pero no, porque Roque Mesa (33), que se hacía el despistado en la frontal, recibió el pase horizontal y disparó un tiro que, tras rozar en la cabeza de Hugo Mallo, entró irremediablemente en la portería visitante.
Lejos de venirse abajo, los vigueses siguieron a lo suyo que era dominar el partido y fruto de ello consiguieron uno de los goles de la jornada. En un contragolpe de manual, Aspas encontró el hueco para pasársela a Cervi en la banda izquierda. Este levantó la cabeza y vio a Larsen. El delantero, en un movimiento de crack, regateó sin tocar el balón a Feddal para plantarse delante de Masip y, en un alarde de generosidad, le cedió el balón a su compañero Óscar (24) para que la empujara a gol y hacer justicia por los méritos de ambos equipos durante la primera mitad.
A veces es sorprendente cómo puede cambiar un encuentro tras solo 15 minutos de descanso, y el choque en el José Zorrilla fue una muestra más de este hecho. Aunque el Celta volvió a crear peligro en los primeros minutos, no fue más que un espejismo. De nuevo a balón parado, los locales se volvieron a poner por delante gracias a un espectacular cabezazo de Joaquín a la salida de un córner.
Tras el 2-1 llegaron los minutos de protagonismo de Sergio León (33), que acababa de entrar en el terreno de juego. En cuestión de menos de 10 minutos, el delantero anotó dos goles y todavía le dio tiempo a fallar un penalti.
No le salía nada al equipo de Coudet, que cumplió la máxima pesimista de “si algo puede salir mal, saldrá mal”. Un inocente penalti de Feddal a Larsen pitado por el VAR le dio la oportunidad de recortar distancias a Aspas. Masip le paró la pena máxima, pero de nuevo el VAR se dio cuenta de que habían entrado varios jugadores antes del lanzamiento, por lo que se tuvo que repetir. Aspas se atrevió a volver a ejecutarlo e intentó cambiarle el lado al portero, pero dio igual porque Masip se hizo enorme para detenerlo una vez más para júbilo de los valientes que se atrevieron a estar más de 90 minutos bajo el chaparrón y así acabó el encuentro.
El Valladolid escala hasta la undécima plaza de LaLiga y volverá a ejercer de anfitrión la próxima jornada en un difícil choque ante la Real Sociedad. El Celta, en caída libre, ya es 13º y recibirá en su siguiente partido al Getafe en duelo por no acercarse peligrosamente a los puestos de descenso.
Jugador Flashscore del partido: Sergio León.