Por necesidades de este desfile, que arrancó a las 6.30 horas locales desde el puente de Austerlitz, la navegación sobre el río se detuvo desde las 6.00 hasta las 12.00.
Los primeros barcos, todos numerados, tenían a bordo pasajeros con pancartas para imitar a las delegaciones, según constató la AFP.
Para este miniensayo, la flota total estaba compuesta por 57 barcos, 39 que representaban a los de las delegaciones, un poco menos de la mitad de los que habrá en la ceremonia, y otros 18 de la organización (asistencia, primeros auxilios), además del Olympic Broadcasting Services (OBS), difusor oficial en la televisión de los Juegos Olímpicos.
Varias lanchas Zodiac de la prefectura de policía y de los bomberos de París surcaban el Sena por la mañana del lunes a ambos lados del convoy principal, que navegaba en fila india sobre los seis kilómetros de recorrido, bajo la atenta mirada de las fuerzas del orden posicionadas sobre los puentes.
Están previstos dos pasos a una velocidad de 9 km por hora, según la organización, que califica este test de "técnico". "Debemos probar también una nueva manera de grabar la ceremonia", había explicado antes Thierry Reboul, director de eventos y ceremonias, creador del concepto.
Sin embargo en este ensayo no se muestra ningún elemento artístico o del espectáculo diseñado por el director de teatro Thomas Jolly, para proteger el secreto de este evento inédito hasta el día de la inauguración.
Esta es la primera vez que una ceremonia de apertura olímpica tendrá lugar al aire libre. Cerca de 10.000 personas podrán asistir pagando sus entradas en las orillas bajas del Sena, y otros cientos de miles podrán seguirla desde las orillas altas de forma gratuita.
La misión de garantizar la seguridad en esta gigantesca fiesta al aire libre, sobre un río, y en presencia de deportistas y jefes de Estado de todo el mundo, es un auténtico rompecabezas para la organización.