Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más

Estos son los deberes del Real Madrid tras perder la Supercopa de España

Benzema, Kroos y Militao durante la final de la Supercopa de España.
Benzema, Kroos y Militao durante la final de la Supercopa de España.AFP
Un comienzo de año muy flojo del Real Madrid desembocó en la derrota por 1-3 en la final de la Supercopa de España contra el FC Barcelona. Fue el fatal desenlace de una serie de malos partidos que dejan claro que los blancos tienen muchas tareas pendientes que completar si no quieren que la temporada se les escape entre las manos en el próximo mes.

Tres partidos consecutivos sin ganar encadena el Real Madrid -empató contra el Valencia y le eliminó por penaltis-. El último de ellos fue el más doloroso, cayó en la final de la Supercopa contra el Barça y supuso el primer título de la ‘Era Xavi’.

Aparte del resultado, las malas sensaciones que dejó el cuadro merengue fueron muy alarmantes. El estado físico de la plantilla está por los suelos, lo que repercute directamente en el desempeño sobre el césped. Una vez más, el mes de enero se le hace cuesta arriba a los de Carlo Ancelotti (63).

Muchos dicen que es el plan de Antonio Pintus (60), que lo que hoy son penas, en febrero serán alegrías porque los jugadores irán volando. Para eso hay que esperar. Lo que sabemos a día de hoy es que uno de los mejores clubes del mundo no puede bajar el nivel en ningún momento del curso. En los próximos 30 días hay varios títulos en juego y un mal papel en ese lapso puede dar por terminada la campaña.

El primer problema es que tras el desengaño con Mbappé (24) en el pasado mercado de verano, la planificación no fue la mejor. Se acometió el fichaje de Tchouaméni (22) para el centro del campo, pero no se tuvieron en cuenta otras posiciones. Ahora, cuando Ancelotti mira hacia el banquillo, le cuesta encontrar opciones.

Hay poca rotación, casi siempre juegan los mismos y la columna vertebral del equipo cada vez es más mayor. Ello hace que en ciertos momentos de la temporada la falta de recursos deje sin aire a los hombres que cargan con la mayor parte del peso del Real Madrid a sus espaldas.

Luka Modric sigue siendo indiscutible a sus 37 años
Luka Modric sigue siendo indiscutible a sus 37 añosAFP

Una plantilla sin equilibrio

Hay posiciones que el club merengue ha cubierto a las mil maravillas confiando en talentos jóvenes como Vini Jr. (22), Rodrygo (22) o Fede Valverde (24). Sin embargo, otras se han descuidado demasiado y, cuando hay algún contratiempo, cuesta encontrar piezas fiables para cubrirlas.

Es el caso de la zaga, la línea que más sufre de todas. Quedó patente en la final de la Supercopa con el mal partido de Antonio Rudiger (29). El alemán nunca fue un central de élite. Se vendió muy bien su llegada como chollo a coste cero, pero la realidad es que hace décadas que su país no saca un gran central. En este caso, sorprende cada vez más la ausencia de Nacho (32), mucho mejor jugador que su compañero.

Si miramos a los laterales encontramos a Mendy (27), uno de los mejores del mundo en su posición, y a Dani Carvajal (31), un hombre que ha vivido tiempos más fructíferos. Lo del español se veía venir. Hizo cuatro partidos buenos el curso pasado y contra el Barça fue incapaz de seguir el ritmo.

Ello nos deja únicamente con un lateral fiable, cuando lo lógico para un plantel que disputa más de 50 partidos al año es tener dos hombres de garantías por puesto. En la izquierda no hay reemplazo y en la derecha se sigue confiando en un Lucas Vázquez (31) que estará de baja el próximo mes y medio.

Carlo Ancelotti da instrucciones a Dani Carvajal
Carlo Ancelotti da instrucciones a Dani CarvajalAFP

La otra zona del campo que preocupa es la delantera. A los de Ancelotti les cuesta mucho hacer gol. En los últimos tres encuentros solo han anotado uno sin ser de penalti. No se puede esperar que Benzema (35) meta otros 50 como hizo la pasada campaña y no tiene un suplente con la calidad suficiente.

El cuento de Mariano y Hazard

Desafortunadamente, el Real Madrid cuenta con dos grandes lastres. El primero es el que debería marcar cuando Karim no está disponible, Mariano Díaz (29). El hispano-dominicano nunca da la talla y, al negarse a salir del club, ocupa un puesto en la plantilla que ha impedido traer a otro jugador más útil.

La segunda carga que arrastran es Eden Hazard (32). El belga prometió que este sería su año, pero han pasado los meses y su nivel no ha hecho más que descender. Tiene una ficha altísima para no haber aportado nada desde que aterrizó en la capital de España. Al mercado invernal le queda la mitad de su vida y la salida del ‘7’ en enero podría ser una buena forma de liberar masa salarial.

Sin duda, son muchos los deberes que tienen pendientes los de la castellana de cara al tramo decisivo del curso. Necesitan subir sus prestaciones para que sus aspiraciones a los títulos importantes no se desvanezcan antes de lo previsto.