El Nápoles, como termómetro de la crisis del Barcelona

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El Nápoles, como termómetro de la crisis del Barcelona

Robert Lewandowski, en el Barça-Villarreal
Robert Lewandowski, en el Barça-VillarrealProfimedia
Aún queda un mundo para la eliminatoria de Champions ante el Nápoles. El partido de ida en el Diego Armando Maradona se disputa el 21 de febrero. Antes, el Barça tiene que consolidar su pase a la próxima Liga de Campeones, ante un Athletic que viene apretando y, a distancia, están Real Sociedad y Betis.

El Barça visita al Alavés el sábado, después recibe al Granada y más adelante viaja a Vigo. Pero el duelo europeo, con la vuelta en Montjuïc, es algo más. Pese a que ni los más optimistas creen firmemente que hay opciones de levantar la sexta Champions esta temporada, el hacer un buen papel o no en Europa va a marcar el estado ánimo del culé y el devenir del resto del curso para lograr los objetivos mínimos en Liga.

Y el Nápoles es el alter ego del Barcelona en Italia. Los de Mazzarri están en una situación similar. Después de arrasar la temporada pasada conquistando el Scudetto con un fútbol de alta escuela, actualmente son novenos en la tabla. Aunque bien es cierto que tienen la Champions a tan sólo cuatro puntos. La cuarta plaza se ha convertido en el objetivo real.

Un equipo "nuevo"

En la Supercoppa ofrecieron una buena imagen derrotando en semis a la Fiorentina (3-0) y sólo la expulsión del Cholito y el gol de Lautaro Martínez in extremis les apartaron del título ante el Inter. Pero es verdad que no sirve de consuelo, más aún cuando cayeron en la Copa con contundencia (0-4) frente al Frosinone.

En el mercado de invierno están intentando dar con la tecla y ya han llegado Pasquale Mazzocchi, Hamed Traoré, Cyril Ngonge y Leander Dendoncker. En Serie A sólo han ganado uno de los últimos cinco encuentros y pese a la llegada de Mazzarri, los resultados no han mejorado sustancialmente los de Rudi Garcia.

11 del Nápoles ante la Lazio este domingo
11 del Nápoles ante la Lazio este domingoProfimedia

El Barça, una incógnita

Está por ver en el estado anímico y físico en el que llega el Barça a la cita, tras la renuncia en diferido de Xavi al banquillo culé y la ausencia de opciones reales de conquistar un título a nivel nacional. Lesiones de larga duración como las de Gavi y Balde tampoco ayudan. 

Es cierto que el Barcelona venía de hacer una más que correcta fase de grupos y que tiene jugadores como De Jong, Gundogan o Lewandowski con experiencia más que suficiente en estas lides. El subidón anímico en caso de pasar a cuartos también puede jugar un papel determinanten en el devenir de la temporada. Habrá que ver también el recibimiento de la hinchada azulgrana a su equipo en la Montaña Mágica, el próximo 12 de marzo.