Brasil, ávido de un triunfo claro tras su decepcionante empate sin goles ante Costa Rica, se sobrepuso a dos sustos tempranos de Paraguay y a un primer penalti errado por Lucas Paquetá a la media hora.
Al centrocampista del West Ham, investigado en Inglaterra por su supuesta actividad en apuestas deportivas, la fortuna le dio primero la espalda en Las Vegas al enviar una pena máxima desviada.
Algunos silbidos se escucharon entre los 46.939 aficionados, la inmensa mayoría brasileños, que no pudieron llenar el flamante Allegiant Stadium, pero Vinicius Júnior los transformó rápidamente en aplausos.
La figura del Real Madrid asumió los galones que le cedió Neymar Júnior y rindió al nivel que su país espera del gran candidato a ganar el Balón de Oro.
Si en sus 31 primeros partidos como internacional anotó tres goles, en Las Vegas celebró un doblete en apenas la primera mitad.
Vinicius también levantó a la grada con regates, bicicletas y malabarismos que hicieron las delicias de Neymar, que otra vez fue un seguidor más de la selección auriverde.
El atacante del Al Hilal, lesionado, siguió el juego desde uno de los palcos del cubierto Allegiant Stadium, a resguardo del asfixiante calor de la ciudad de los casinos.
Savinho aprovecha la oportunidad
En el arranque, el técnico del combinado guaraní, el argentino Daniel Garnero, trató de sorprender a su rival desplegando una presión muy alta, consciente de que la circulación de balón no es una de las virtudes de esta versión de la 'Seleçao'.
Antes de que el nerviosismo se apoderara de su equipo y afición, Vini rompió la sequía brasileña en esta Copa América en una triangulación ofensiva que acabó con la pelota en sus pies para batir por bajo al guardameta Morínigo.
El tanto fue una liberación para los presionados miembros de la Canarinha, que lo celebraron a todo pulmón y con algún gesto reivindicativo frente a sus aficionados.
Dos celebraciones más llegaron antes del descanso después de un disparo al larguero de Bruno Guimaraes.
El joven Savinho, que entró en la alineación por Raphinha, aprovechó varios rebotes en el área para colocar el 2-0.
Otra acción desafortunada de Paraguay terminó en el segundo gol del ex del Flamengo, quien, al acudir al área pequeña a presionar, provocó que Alderete impactara un despeje en su pierna que acabó en la red.
Un pequeño susto
El central del Getafe se rehízo del error al anotar el 1-3 con un trallazo desde fuera del área.
Otra gran parada del meta de Liverpool impidió que Julio Enciso, la gran esperanza paraguaya, amenazara un triunfo que quedó visto para sentencia con otra pena máxima señalada por mano de Villasanti.
Aunque retumbaron los cánticos de "Vini, Vini", fue Paquetá quien pidió una segunda oportunidad y anotó el definitivo 1-4.
Dorival Junior le concedió 10 minutos de juego al joven Endrick Felipe en la recta final, en la que el paraguayo Andrés Cubas fue expulsado por patear a Douglas Luiz cuando ambos estaban en el suelo.
El martes, los brasileños necesitarán vencer a Colombia en Santa Clara (California) para terminar en lo más alto del grupo y evitar un probable cruce con Uruguay en cuartos de final.
Su último oponente, en cambio, buscará los puntos del honor frente a Costa Rica, que tiene una unidad y necesita golear y que Brasil pierda para clasificarse a cuartos de final, una combinación casi milagrosa.