Los damnificados del epílogo en los grupos D, E y G fueron Liga de Quito, Palestino de Chile y Rosario Central, que terminaron terceros en dichas llaves y con el premio de consolación de pasar a los playoffs de la Copa Sudamericana, que da acceso a los octavos de final de ese torneo, el segundo en importancia a nivel de clubes de la CONMEBOL.

A pesar de gozar de la nómina más costosa del continente, Flamengo, que busca su cuarta corona de Libertadores, tuvo que conformarse con terminar segundo en el Grupo E, detrás del Bolívar, que se quedó con el primer lugar al sumar 13 puntos.

El Mengão alcanzó 10 con la victoria 3-0 sobre el colista Millonarios (3) en el Maracaná con un doblete de Pedro (7, 44) y un gol en contra de Juan Pablo Vargas (25).

En La Paz, Bolívar se alió con los 3.600 m de altitud de la ciudad para aplacar a Palestino con un 3-1, suficiente para terminar en lo más alto de la llave.

Sin embargo, la Academia paceña no encontró los dos primeros goles entre sus hombres, sino que fueron dos autogoles, de José Bizama (35) y Ariel Martínez (46), los que abrieron el camino y el primer lugar de la llave. Francisco da Costa (87) se encargó del tercero. El de los chilenos fue obra de Felipe Chamorro (68).

Junior primero y regresa Peñarol

Los boletos a los octavos en el Grupo D habían quedado resueltos en la quinta fecha, y sólo la sexta determinaría el orden en que Junior y Botafogo se acomodarían en la siguiente ronda.

El Tiburón se quedó con la primera plaza y el Fogão con la segunda, luego del empate sin goles en Barranquilla.

Ambos terminaron con 10 puntos, pero el club colombiano se quedó con la primera casilla por mejor diferencia de goles (+3 contra +1).

A Liga de Quito, el actual campeón de la Sudamericana, le correspondió el boleto de consuelo a "su" Copa, al terminar tercero luego de vencer 2-0 a Universitario en la capital ecuatoriana.

Con Atlético Mineiro clasificado anticipadamente, lo único pendiente en el Grupo G era quién acompañaría al equipo de Hulk a los octavos. La suerte favoreció a Peñarol, el cinco veces campeón de la Libertadores.

Una trabajada victoria 2-1 sobre Rosario Central en Montevideo le dio el visado al Carbonero, que no llegaba a octavos desde hace 13 años.

Leo Fernández, el mejor jugador del partido, en dos oportunidades (32 y 83), catapultó al aurinegro a una nueva fase del torneo. Agustín Módica (66) había marcado el empate momentáneo.

Mineiro terminó con 15 puntos en lo más alto del grupo tras una goleada 4-0 al colista Caracas. Peñarol fue segundo con 12 y Rosario Central alcanzó las 7 unidades.