Es inexplicable que una selección como Francia, con el arsenal ofensivo que tiene, que incluye a Mbappé, Griezmann, Marcus Thuram, más Kolo Muani, Giroud o Coman, sólo haya sido capaz de anotar tres goles en cuatro partidos completos de la Eurocopa. Dos de ellos ha sido en propia puerta y otro de penalti.

De momento le ha servido para avanzar a los cuartos de final del torneo donde le esperará Portugal o Eslovenia, pero las sensaciones no son buenas, pese a que Kanté haya mostrado autoridad en el centro del campo y Saliba se haya consolidad como una referencia en el eje de la zaga.

Mbappé de penalti y Wöber y Vertonghen en propia puerta han sido sus goleadores.

Maignan, siempre en su sitio

Mike Maignan está dando seguridad a Francia. El meta del Milan recibió dos disparos a puerta durante el partido que no le pillaron en frío. Intervino a la perfección y evitó males mayores para los franceses. En cuatro partidos sólo ha concedido un gol. La sequía ofensiva se compensa con una gran seguridad defensiva.

Muy poco de Bélgica

La eterna aspirante ha completado una Eurocopa bastante discreta. En un grupo asequible, ha finalizado segunda tras un cuádruple empate a cuatro puntos, tras perder con Eslovaquia, ganar a Rumanía y empatar frente a Ucrania.

Contra Francia, apenas lanzó a puerta. Un remate de Lukaku y otro de De Bruyne en la segunda parte, pero poco más. Puede que no sea el equipo que finalizó tercero en el Mundial de Rusia pero una selección que cuenta con De Bruyne, Carrasco o Lukaku debe ofrecer mucho más.

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