El seleccionador ha experimentado muchos altibajos a lo largo de sus casi ocho años de mandato, y ahora tiene la oportunidad de poner la guinda con el primer gran trofeo de su nación en más de 50 años.
Flashscore ha decidido repasar los momentos más destacados de los 101 partidos de Southgate como seleccionador de Inglaterra y el largo camino que ha recorrido hasta alcanzar de nuevo la gloria.
La historia de Southgate al frente de los Tres Leones incluye desde momentos históricos hasta decisiones que han dividido a la afición.
Un nombramiento polémico
La etapa de Southgate como seleccionador de Inglaterra comenzó casi por accidente, sustituyendo a Sam Allardyce después de que éste se marchara de mutuo acuerdo tras una polémica operación encubierta de periodistas británicos.
El exentrenador del West Ham fue tristemente célebre al ser grabado en cámara explicando cómo eludir las normas de propiedad de terceros y burlándose del exseleccionador Roy Hodgson.
Su rápida destitución llevó al nombramiento de Southgate, que entonces formaba parte del cuerpo técnico de los juveniles, con carácter interino, mientras la FA iniciaba la búsqueda de un seleccionador permanente.
A pesar de su interinidad, una buena racha de resultados, que incluyó una victoria por 3-0 contra Escocia y un empate a 2-2 con España, le convertiría en seleccionador a tiempo completo.
Al asumir el cargo, Southgate declaró: "Estoy extremadamente orgulloso de haber sido nombrado seleccionador de Inglaterra. Sin embargo, también soy consciente de que conseguir el puesto es una cosa, ahora quiero hacer el trabajo con éxito. Estoy decidido a darlo todo para ofrecer al país un equipo del que se sientan orgullosos y al que disfruten viendo jugar y desarrollarse. Para mí, el trabajo duro empieza ahora".
Casi ocho años después, el exdefensa del Crystal Palace y del Aston Villa vuelve a estar a un paso de alcanzar la grandeza, y sin duda ha creado un equipo del que la nación se siente orgullosa.
Historia de la tanda de penaltis
Después de una firme campaña de clasificación para la Copa Mundial 2018 que vio a Inglaterra liderar su grupo sin perder un partido, los Tres Leones se dirigieron a Rusia para el primer gran torneo de Southgate al mando.
Su debut en el torneo fue bastante bien en la fase de grupos, y un segundo puesto por detrás de Bélgica -uno de los favoritos para el trofeo en ese momento- estableció un enfrentamiento de octavos de final contra Colombia.
El partido terminó 1-1 en la prórroga, por lo que Inglaterra tuvo que enfrentarse de nuevo a la tanda de penaltis en un gran torneo, lo que trajo demasiados malos recuerdos a los aficionados.
Lo que sucedió a continuación quedaría grabado en los libros de historia durante años.
Hasta ese momento, los Tres Leones habían perdido sus cinco últimas tandas, y casi nadie esperaba nada diferente en esta ocasión, como era habitual entre los aficionados ingleses de la época. Incluso durante los lanzamientos desde el punto fatídico, Colombia tuvo la oportunidad de ganar después de que Jordan Henderson fallara su lanzamiento.
Sin embargo, Southgate ha mostrado un nuevo nivel de resistencia durante su etapa como seleccionador, y la primera vez que lo hizo fue contra los sudamericanos en 2018.
Tuvieron algo de suerte con un disparo de Mateus Uribe que se estrelló en el larguero, pero el guardameta Jordan Pickford cambió totalmente las tornas con una excelente parada ante Carlos Bacca. El portero del Everton fue uno de los muchos jugadores que debutaban en el torneo junto al seleccionador y que se convertirían en incondicionales de Inglaterra en los seis años siguientes.
Eric Dier transformó el penalti de la victoria, desatando la euforia de la nación y marcando un punto de inflexión en la confianza de los aficionados en su país, que se convirtió en el inicio de una afición especialmente fuerte hacia Southgate.
Unir a una nación en la Eurocopa 2020
La buena forma de Inglaterra bajo el mando de Southgate continuaría con solo cinco derrotas en tres años tras el Mundial de 2018, lo que llevó a los seguidores a entusiasmarse de cara a una postergada Eurocopa 2020.
A pesar de su buen rendimiento sobre el terreno de juego, la nación en su conjunto había estado dividida durante la mayor parte de un año debido a la pandemia de COVID-19 y necesitaba un serio impulso de cara al verano de 2021.
Inglaterra ofreció precisamente eso con algunas actuaciones excelentes, venciendo a Alemania y Dinamarca en la fase eliminatoria y proporcionando a los aficionados una muy necesaria liberación de la frustración que se había ido acumulando durante tanto tiempo.
El resultado ante Alemania, en particular, marcó un hito en el mandato de Southgate. Ganar un partido tan importante en casa desató la euforia en todo el país.
Equivocarse en la final
Aunque su mandato había sido en gran medida positivo hasta ese momento, los aficionados se sentirían defraudados por Inglaterra -especialmente Southgate- por primera vez cuando llegaron a la final de la Eurocopa 2020.
A pesar de adelantarse en el marcador en Wembley contra Italia, los Tres Leones perderían en la tanda de penaltis.
A primera vista, eso no parece tener mucho que ver con el seleccionador. Por desgracia, el estilo reservado de Southgate se volvió en su contra e Inglaterra permitió que Italia volviera a meterse en el partido cuando debería haber aprovechado el impulso para marcar otro gol.
Las sustituciones durante el partido tampoco ayudaron, con la salida de Declan Rice y la pérdida por parte de los Tres Leones de cualquier atisbo de control en el centro del campo. Después, Southgate sacó a Marcus Rashford y Jadon Sancho para la tanda de penaltis, y el tiro le salió por la culata.
La derrota ante Italia fue la primera señal de que la confianza de algunos seguidores en Southgate podía estar flaqueando y, en realidad, es algo de lo que le ha costado desprenderse desde entonces.
San Marino entró en la historia
Inglaterra marcaría otro hito bajo la dirección de Southgate cuando se enfrentó a San Marino en la fase de clasificación para el Mundial de 2021, registrando la mayor goleada de la historia del seleccionador con un 10-0.
Los cuatro goles de Harry Kane, así como los tantos de Bukayo Saka y Harry Maguire, permitieron al equipo volver a demostrar lo buen equipo ofensivo que puede llegar a ser.
La victoria coronó otra campaña de clasificación invicta, y apenas una semana después Southgate firmó una nueva prórroga de tres años de su contrato.
Una horrible campaña en la Nations League
Tras una pésima campaña en la Liga de Naciones de la UEFA en el verano de 2022, surgieron serias dudas sobre el seleccionador, lo que llevó a varios aficionados a pedir un cambio de guardia de cara al próximo Mundial de Catar.
Inglaterra no ganó ninguno de sus seis partidos de la fase de grupos, incluidas dos derrotas ante la modesta Hungría y otra ante Italia, vigente campeona de Europa.
La pésima racha dejó un sabor amargo a muchos aficionados y se traduciría en las críticas más feroces a las que Southgate se había enfrentado hasta entonces.
Las dudas empezaron a crecer antes del Mundial, y el seleccionador necesitaba una gran actuación en Catar para recuperar el apoyo de los aficionados.
Decepción en el Mundial
A pesar de una sólida actuación en la fase de grupos y de una gran victoria contra Senegal en octavos de final, Inglaterra volvió a quedarse corta bajo la batuta de Southgate en los cuartos de final del Mundial 2022.
Los Tres Leones se enfrentaron a la favorita Francia en los cuartos de final y acabarían perdiendo por 2-1 después de que el goleador récord, Kane, fallara un penalti en las postrimerías del partido.
Lo que hizo aún más dolorosa la derrota fue el hecho de que el capitán de Inglaterra había lanzado una pena máxima antes en el partido, pero falló en el mismo escenario cuando su equipo necesitaba desesperadamente un balón de oxígeno.
Aunque el resultado fue decepcionante, no fue tan fácil culpar a un seleccionador al que sus jugadores habían defraudado sobre el terreno de juego y no por un error táctico como en el pasado.
La derrota significó otro gran torneo sin trofeos, pero después de llevar a su país a cotas nunca vistas en los últimos 20 años, Southgate tuvo otra oportunidad de alcanzar la gloria al permitírsele prolongar su contrato hasta después de la Eurocopa de 2024.
Volver a hacer creer a los aficionados en la Eurocopa 2024
Hace dos semanas, casi todos los aficionados estaban hartos del estilo de juego lento y pesado de Inglaterra, que dio resultados mínimos en la fase de grupos de la Eurocopa 2024.
Incluso después de rozar los octavos de final, los Tres Leones estuvieron a segundos de caer eliminados a manos de Eslovaquia.
Entonces todo cambió con un momento de magia de Jude Bellingham. El centrocampista realizó una espectacular chilena para empatar en el último minuto del tiempo añadido, antes de que el suplente Ivan Toney asistiera a Kane para el gol de la victoria en la prórroga, encendiendo la llama que Southgate había encendido hace tanto tiempo, cuando llevó por primera vez a Inglaterra al Mundial de 2018 y a la Eurocopa de 2020.
Una mejor actuación siguió en los cuartos de final contra Suiza, con Southgate cambiando la formación e incluso sustituyendo a las principales estrellas como Kane y Phil Foden; algo que la mayoría de los aficionados nunca habrían esperado antes de que comenzara el torneo.
Saka marcó el gol del empate en los últimos minutos y el partido terminó 1-1, por lo que Inglaterra tuvo que enfrentarse de nuevo a la tanda de penaltis.
Pickford hizo otra parada en la tanda, mientras que los cinco jugadores de campo marcaron desde el punto fatídico, incluidos los suplentes Toney, Cole Palmer y Trent Alexander-Arnold, así como Saka, que se redimió tras su ausencia en la Eurocopa 2020 en un momento conmovedor que enganchó aún más a los aficionados.
La esperanza volvía a crecer cuando otra actuación decidida estableció una cita con los holandeses en la final a cuatro.
Parecía una historia similar de cara a los últimos 15 minutos de la semifinal, con empate a uno en el marcador, pero Southgate se atrevió de nuevo con una astuta doble sustitución. Palmer y Ollie Watkins sustituyeron a Foden y Kane, un cambio valiente al retirar a los que posiblemente sean los dos mejores jugadores de la plantilla.
Tras su mejor actuación en lo que va de torneo, Inglaterra protagonizó otro momento mágico cuando Palmer cedió a Watkins para que anotara el gol de la victoria por la escuadra en los últimos segundos del encuentro.
Southgate y sus jugadores cumplieron una vez más, enloqueciendo al país y volviendo a poner de su lado incluso a los más escépticos para otro intento de alcanzar la gloria en la final de la Eurocopa 2024.
Tras la semifinal, el seleccionador admitió: "Todos queremos que nos quieran, ¿verdad? Cuando sólo lees críticas, es difícil. Así que poder celebrar una segunda final es muy, muy especial. Poder brindarles (a los aficionados) una noche como la de hoy es muy especial".
Su mandato no ha sido perfecto, pero Southgate ha llevado a Inglaterra a cotas nunca vistas en décadas y ahora los Tres Leones tienen a los aficionados creyendo una vez más.
No importan las críticas ni las preguntas, Inglaterra está de nuevo en una gran final y a un partido de la inmortalidad futbolística.
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