Eurocopa: Mbappé se reencuentra con Cristiano Ronaldo en el Francia-Portugal

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Kylian Mbappé se reencuentra con su héroe Cristiano Ronaldo

Mbappé no termina de despegar en la Eurocopa
Mbappé no termina de despegar en la EurocopaReuters
Kylian Mbappé (25) está deseando reencontrarse con su ídolo de la infancia, Cristiano Ronaldo (39), cuyos pósters solía pegar en la pared de su habitación, cuando Francia se enfrente el viernes a Portugal en los cuartos de final de la Eurocopa.

Mbappé sólo tenía 10 años cuando se encontró por primera vez con el portugués, al que pidió descaradamente sus botas tras colarse en la zona de prensa al término del partido de Liga de Campeones de 2009 entre el Olympique de Marsella y el Real Madrid.

"Es un honor jugar contra él, todo el mundo sabe la admiración que siento por el jugador. Estamos en contacto. Me pregunta qué me pasa en la vida y me da consejos, y para mí es un honor, sobre todo pensando en lo que ha hecho por el mundo del fútbol", declaró Mbappé en rueda de prensa.

"Es único...nunca habrá otro Cristiano Ronaldo. Ha dado forma al fútbol. Inspira y ha inspirado a generaciones. Ha marcado goles, ha ganado copas, su currículum habla por sí solo.

"Así que respeto total por él, pero espero que mañana no esté tan contento porque espero que seamos nosotros los que pasemos a semifinales".

Mbappé pronosticó una reñida contienda, afirmando que los "pequeños detalles" serán decisivos en el choque del Volksparkstadion.

"La Eurocopa siempre es muy reñida, siempre es una competición muy difícil para nosotros. Ahora sólo quedan grandes equipos en liza, y hay que estar atentos a cada pequeño detalle, ya sea en ataque o en defensa", señaló.

"En los entrenamientos hemos mejorado, hemos trabajado la definición y la intensidad. Trabajamos lo mejor que pudimos con el tiempo que teníamos. Pero estamos listos y con ganas para mañana".

Francia ha tenido cuatro días para recuperarse desde la ajustada victoria del lunes por 1-0 sobre Bélgica, lo que también ha supuesto más tiempo para que Mbappé se acostumbre a la máscara facial que ha tenido que llevar desde que se rompió la nariz en su primer partido del torneo.

Anteriormente la describió como horrible, pero el jueves había mitigado su desdén.

"A decir verdad, tengo suerte, porque sin la máscara no estaría aquí, no estaría jugando. Debería dar las gracias a la máscara. Ya he dicho cómo me sentía y eso no va a cambiar mañana, ni hasta el final de la competición", afirmó.