Fabio Capello desvela intimidades del vestuario de su Real Madrid como el olor a alcohol
En la inauguración del curso 2023/24 del Instituto Universitario de Mediadores Lingüísticos, en su país, el veterano preparador italiano ha recordado algunas de las situaciones que vivió dentro del complicado vestuario del Madrid galáctico.
Comenzando por Ronaldo Nazario y su gusto por las fiestas y las mujeres. "Pesaba 94 kilos. En Corea, en el Mundial de 2002, pesaba 82. Le dije que bajara de peso y llegó a 92,5. Le gustaba la fiesta y estar rodeado de mujeres", ha contado.
Pero hay más. "Decidí despedir a Ronaldo en febrero de 2007. Berlusconi me pidió consejo sobre una posible compra de Ronaldo. Yo se lo desaconsejé. Días después, Ronaldo fichó por el Milan", ha admitido.
Como también ha recordado que Van Nistelrooy, un profesional íntegro, se quejó de cómo olía el vestuario. "Es verdad, huele a alcohol", asegura Capello que le dijo al neerlandés, quien en su día ya negó haber dicho eso.
Otro de los futbolistas problemáticos fue Antonio Cassano, al que no pudo recuperar. Con problemas de lesiones y de sobrepeso, algo correlacionado, el técnico ha espetado que incluso llegó a irse "a las manos. Pedía patatas fritas antes de cada partido, algo inaceptable".
Aun con todos estos inconvenientes, como también el de apartar durante un mes, en enero, a David Beckham por firmar por los Galaxy, el equipo se las apañó para remontar nueve puntos al Barcelona y terminar ganando la Liga.