Pero está claro que no quiere volver. Ya cuando se fue al Chelsea lo dijo varias veces. Y ahora que está en el Barça, el club de sus sueños desde que era pequeño, según declaró tras su fichaje, pues menos aún quiere pensar en rojiblanco.
Joao Félix marcó el tanto de la victoria y lo celebró con un beso más que polémico a la grada donde estaban los aficionados atléticos, que le reprocharon el gesto. Sin embargo, O Menino restó hierro a su celebración. "Fue espontánea. Al final, te pones en el calor del partido y fue como un alivio por todo lo que he vivido este último verano. Sólo las personas que están cerca de mí saben cómo ha sido. Mi familia, principalmente. Esto ha sido para ellos, ha sido un alivio", repitió.
También lo ha sido por todo lo que se ha hablado de él en estos últimos días. "Siempre soy el tema, se habla de mí para bien o para mal, pero estoy tranquilo, no miro lo que hablan, hago mi trabajo, disfruto de mis compañeros y del club".
Polémica con Giménez
De sangre caliente, Chema Giménez ha sido uno de los atléticos que se las ha tenido tiesas con el portugués. Pero Joao no ha querido polemizar más. "Me llevo bien con mis excompañeros. No tengo nada contra ellos. Los quiero mucho y deseo que les vaya a muy bien... menos contra nosotros", ha comentado antes de contestar con un "no" rotundo a la pregunta de si se había cruzado con el Cholo Simeone.
A lo suyo, y feliz por cómo la afición culé gritaba su nombre, Joao Félix espera que sigan haciéndolo por mucho tiempo. "Sé la grandeza de este club y tener a la afición gritando tu nombre es algo que no pasa mucho. Estoy contento y a seguir trabajando para que sigan cantando".