Luka Modric se convirtió en Vigo en el jugador más veterano que disputa un partido oficial en la historia del Real Madrid. Con 39 años y 40 días, batió el registro que tenía Ferenc Puskás desde 1966. A finales de la temporada anterior, cuando se desconocía si iba renovar su contrato por una campaña más, pocos se atrevían a hacer un pronóstico respecto a su futuro. La ampliación, que se oficializó a mediados de julio, dio pie a esta marca histórica.
Ha habido que esperar más de medio siglo para que alguien deje atrás al húngaro, un jugador que se incorporó al cuadro blanco superada ya la treintena. Pese a ello, enamoró a la afición a base de goles (ganó el Pichichi en cuatro ocasiones) y conquistó un buen puñado de éxitos a nivel colectivo: se proclamó campeón del torneo doméstico cinco veces y levantó tres Copas de Europa, además de una Intercontinental y una Copa de España.
"Era un partido difícil. Hemos sufrido como un equipo y nos llevamos una victoria importante. 250 triunfos en Liga es un número impresionante, pero hay que ganar más partidos y más títulos. Es a lo que el Real Madrid te obliga", dijo el balcánico ante los medios oficiales de la entidad. Aunque no estuvo entre los elegidos por Carlo Ancelotti para el once, su aparición en la segunda parte resultó clave al asistir a Vinicius Júnior en el definitivo 1-2.
Modric, el futbolista con más títulos ganados con el Madrid, se estrenó en el campeonato regular el día 2 de septiembre de 2012 y ha marcado un total de 28 dianas. El Celta, por cierto, es el equipo al que más ha ganado (19 resultados positivos) desde que dejó atrás el Tottenham Hotspur y la Premier League. Aún tiene el encuentro de vuelta, en mayo de 2025, para consolidar al plantel celeste como su rival favorito en España.