El centrocampista belga llegó en enero como un fichaje de futuro, pero también con la opción de ayudar desde el primer instante. Esa siempre fue la idea y por eso el técnico argentino le dio minutos e incluso una titularidad nada más aterrizar en el Metropolitano.

Pero al Cholo Simeone no le convenció nada su rendimiento y decidió que su adaptación tendría que llegar desde los entrenamientos y en otro tipo de situación. Algo similar, o incluso peor, a lo que ha ocurrido con Vitor Roque en el Barcelona. Porque sólo ha jugado tres partidos desde su llegada: 45 minutos como titular ante el Rayo, 20 ante Las Palmas medio mes después y otros 20 contra el Cádiz el 9 de marzo. Desde entonces, banquillazo tras banquillazo.

Ahora, en estas dos últimas jornadas por fin parece que el aficionado colchonero podrá ver en acción a su joven promesa.

"Es un chico joven, que tiene un futuro importante y que le ha tocado jugar poco como le ha tocado jugar a Güler poco en el Real Madrid o a Vitor Roque en el Barcelona también. Son chicos jóvenes y hay momentos en que se les puede utilizar y hay otros en los que hay que esperar que puedan encontrar ese momento", explicó el entrenador del Atlético de Madrid. 

Es más, espera que Vermeeren demuestre ahora el porqué de su fichaje y que sea uno más en la lucha por la titularidad desde el próximo verano. "Ojalá que en estos dos partidos que queden pueda aportarle al equipo lo que creemos que tiene", dijo esperanzado.