Sebastián Villa, condenado por violencia de género, vuelve al fútbol argentino
"¡Bienvenido, Caudillo!", expresó Independiente Rivadavia a través de sus redes sociales, un texto que vino acompañado por una fotografía del propo Sebastián Villa vestido con ropa de entrenamiento.
"Estoy muy contento de estar en la Lepra (como se conoce al club mendocino). La expectativa que tengo es que podamos hacer un gran torneo y permanecer en primera división", dijo el colombiano en un vídeo.
"Vengo con muchas ganas de aportar mi mejor versión, de hacer las cosas bien, de no ahorrarme ninguna gota de sudor y de ayudar al equipo", agregó el futbolista de 28 años.
Villa viene de jugar en el Beroe, donde apenas disputó 11 encuentros y anotó cinco goles, después de que en la temporada pasada se fue de Boca Juniors, que lo marginó del plantel tras ser condenado a dos años y medio de prisión por violencia contra su expareja Daniela Cortés.
El atacante cafetero no ingresó a la cárcel porque recibió una pena menor a los tres años necesarios para ser de cumplimiento efectivo, y además tiene una causa por abuso sexual que inició Tamara Doldán, que luego alcanzó un acuerdo económico con el jugador y desistió de continuar con la acusación.
Villa llegó a Boca en 2018 y se convirtió en titular indiscutible por su habilidad para jugar por las bandas. Conquistó siete títulos en el club 'xeneize', pero todo cambió a raíz de las denuncias recibidas por violencia de género.