Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más

El fútbol francés, de nuevo en la cuerda floja por los disturbios de los hinchas

Reuters
El presidente del Olympique de Marsella, Pablo Longoria
El presidente del Olympique de Marsella, Pablo LongoriaReuters
El fútbol francés se sumió en un nuevo abismo de violencia tras la suspensión del partido entre el Olympique de Marsella y el Olympique de Lyon, en el que el autobús de los visitantes fue atacado con piedras y botellas de cerveza, hiriendo a su entrenador, Fabio Grosso.

Grosso sufrió heridas en la cara en otro episodio de brutalidad por parte de los aficionados que sacude la Ligue 1, que hace dos años se vio empañada por varios actos de violencia y disturbios en las gradas.

Dado que los incidentes se produjeron fuera del estadio Velódromo de Marsella, la Liga Francesa (LFP) no tiene jurisdicción para sancionar al equipo local, aunque podría decidir que el partido se juegue a puerta cerrada.

Estas actuaciones ofrecen una mala imagen para la LFP, que ha estado negociando un acuerdo de derechos televisivos para 2024-29, cuya licitación finaliza el jueves, y han dado lugar a unas imágenes embarazosas a menos de un año de los Juegos Olímpicos de París 2024.

El Ministro del Interior, Gerald Darmanin, declaró que nueve personas habían sido detenidas hasta el momento. "Espero que se impongan las penas de prisión más altas posibles a esos aficionados que arruinaron la fiesta a todo el mundo", añadió en BFM TV.

Algunos partidos de la ronda preliminar de los Juegos Olímpicos se jugarán en Marsella, donde estalló la violencia en el Mundial de 1998 entre hinchas ingleses y la policía francesa.

"El OL lamenta que este tipo de situaciones se repitan cada año en Marsella y pide a las autoridades que evalúen la gravedad y la repetición de este tipo de incidentes antes de que se produzca una tragedia aún más grave", señaló el Lyon en un comunicado, en el que el club añadió que presentará una queja legal formal.

"Lo ocurrido a Fabio Grosso es totalmente inaceptable", declaró Pablo Longoria, presidente del OM. "Es algo que no puede ocurrir en el fútbol. Aunque haya ocurrido fuera del estadio, es inaceptable. Estoy enfadado y consternado por la situación".

También como club los marselleses condenaron este lunes en un comunicado el comportamiento de sus aficionados. "El Olympique de Marsella deplora los inaceptables incidentes que tuvieron lugar en las inmediaciones del Stade Orange Velodrome, en los que se vieron implicados el autobús del equipo profesional y autobuses de seguidores del Olympique Lyonnais", rezaba el comunicado, que añadía que "el club desea al entrenador del Lyon, Fabio Grosso, una pronta recuperación y condena enérgicamente este comportamiento violento, que no tiene cabida en el mundo del fútbol ni en la sociedad".

La ministra de Deportes, Amelie Oudea-Castera, declaró: "Estos actos inaceptables niegan los valores mismos del fútbol y del deporte, y todos los autores deben ser encontrados y castigados severamente".

Saludos nazis

La ministra de Deportes, Amelie Oudea-Castera, declaró a la cadena de televisión France 2 que "hemos visto casi todo lo que uno no querría ver", y añadió que los hinchas también habían proferido insultos homófobos y racistas en el interior del estadio Velódromo de Marsella. "Fue penoso, repugnante, asqueroso".

El Lyon condenó el comportamiento de sus aficionados después de que algunos fueran vistos haciendo saludos nazis en el Velódromo. "El OL condena firmemente el comportamiento racista inaceptable de los individuos en las gradas el domingo", dijo el club en un comunicado.

"El club ha solicitado las imágenes para identificar a los autores de cualquier acto contrario a la ley, pero también contrario a sus valores, y reitera su determinación de mantenerlos alejados de las gradas".

Siete sospechosos habían sido detenidos el domingo por la noche, añadió el ministro.

Ataques en Marsella reincidentes

El domingo no fue la primera vez que el autobús del equipo visitante ha sido atacado en Marsella, con incidentes previos reportados en 2016 y 2019.

También se produjo después de que los problemas con los aficionados empañaran la temporada 2021-2022.

En aquella ocasión, el Niza fue sancionado con dos puntos y uno de sus jugadores/hinchas suspendido, tras los graves incidentes ocurridos durante su partido contra el Marsella, cuando los jugadores visitantes se enfrentaron a los aficionados locales, que les lanzaron proyectiles e irrumpieron en el terreno de juego.

El derbi del norte entre el RC Lens y el Lille también se vio afectado por problemas de público, y el comienzo de la segunda parte se retrasó después de que los aficionados rivales se lanzaran objetos unos a otros antes de que la gente corriera al campo, lo que provocó la intervención de la policía antidisturbios y de los comisarios.

En esa temporada 2021-2022, también hubo problemas de público en Montpellier, Angers, Marsella y Saint Etienne.