El resurgimiento de Mohammed Salisu se puso de manifiesto en la reciente victoria del Mónaco por 3-0 sobre el Auxerre, lo que supuso su tercera aparición en cuatro partidos de Ligue 1 esta temporada. A diferencia del curso pasado, en el que sólo jugó 12 partidos en el torneo doméstico, este cambio es elocuente de su transformación física.
La durabilidad del zaguero se ha visto acentuada por su capacidad para pasar sin problemas de la selección ghanesa a los compromisos con su club. Tras disputar un par de partidos completos con el cuadro africano, contra Angola y Níger, el ex del Real Valladolid regresó al principado el jueves, y dos días más tarde ofreció un recital de 90 minutos.
Cuando se le preguntó por su actual estado físico, Salisu derrochó confianza en una entrevista exclusiva con Flashscore: "Diría que estoy en mi mejor forma desde hace mucho tiempo, e intento seguir trabajando día a día y seguir mejorando".
Este fin de semana se mostró inconmesurable (lideró con siete despejes, ganó dos entradas y bloqueó un disparo). Su juego aéreo fue particularmente impresionante, ganando cinco de siete duelos. Además, exhibió sus dotes de distribuidor, completando 69 de 84 pases.
Constantemente rompía líneas con facilidad para encontrar a los centrocampistas Denis Zakaria y Lamine Camara. Cuando el rival presionaba arriba, el jugador que militó en el Southampton salía ocasionalmente en largo, encontrando con éxito a Aleksandr Golovin y Eliesse Ben Seghir en un par de ocasiones.
La imbatibilidad del Mónaco no ha pasado desapercibida, y el equipo se encuentra a sólo dos puntos del líder, el PSG, después de cuatro jornadas. Con la reciente marcha de Kylian Mbappé, crece la sensación de que la carrera por el título de la Ligue 1 podría estar más abierta este año. Sin embargo, Mohammed sigue siendo cautelosamente optimista sobre las posibilidades de su equipo, que no reina desde la temporada 2016/17.
"Empezamos bien como equipo y luego yo empecé bien como individuo. Estoy feliz por esto, porque llegué aquí lesionado y fue complicado. Esta es mi primera temporada completa. Empecé la pretemporada con el equipo y siento que esta es importante para mí, así que necesito prepararme", agregó.
"Hay buen espíritu en el campamento. Los chicos tienen buena energía en los entrenamientos. Intentamos luchar cada partido, e ir partido a partido porque es una temporada importante", añadió el central.
Para Salisu, el encuentro de la Liga de Campeones de la UEFA contra el Barcelona representa un hito importante, especialmente porque nunca ha jugado en la máxima competición europea de clubes.
"Es importante para el equipo y también para mí, así que tenemos que centrarnos en el partido", expresó.
El ghanés no es ajeno a enfrentarse al Barcelona, ya que se topó con él durante su etapa en LaLiga y recientemente jugó en Montjuïc con motivo del Joan Gamper (victoria por 0-3).
Sin embargo, el central reconoce que el encuentro será un reto totalmente diferente, algo que queda (casi) en evidencia si se observa la gran dinámica del plantel culé (pleno al 15 en la competición doméstica).
"Sí, no fue un partido fácil, pero ganamos. Ya sabes cómo juegan y que tienen buenos y peligrosos jugadores arriba, así que tenemos que ir con todo lo que tenemos, como jugamos la última vez", apuntó.
M. Salisu, que busca consolidar su gran inicio de curso, mantiene los pies en el suelo y se centra en seguir mejorando.
"Yo intento, como he dicho, jugar partido a partido y seguir mejorando, porque esto no ha hecho más que empezar, así que intento jugar y mejorar en cada partido", concluyó.
Una vez superadas sus lesiones y con la moral renovada, el ghanés está llamado a convertirse en la piedra angular de la defensa monegasca. A lo largo de la temporada, todas las miradas estarán puestas en este futbolista, que parece haber resurgido de las cenizas de los reveses sufridos en el pasado para llegar a lo más alto.
