Megan Rapinoe fue indiscutible en la alineación estadounidense que ganó los Mundiales de 2015 y 2019, pero a sus 38 años no es titular con el técnico Vlatko Andonovski.

Jugó media hora en el partido contra Vietnam, que su equipo ganó 3-0, pero no entró en el empate contra Países Bajos.

"Aún tienes mucho que ofrecer dentro y fuera del campo. Tal vez no seas titular, jugando 90 minutos, pero a veces no es eso lo que necesitas. Necesitas los 20 minutos en dos partidos que hacen ganar al equipo el torneo", declaró Rapinoe en conferencia de prensa en Auckland, donde su equipo enfrentará el martes a Portugal.

Sabe cuál es su rol

"Cada día en el entrenamiento digo: 'voy romperte el trasero', y eso las hace mejores a ellas y mí", expresó sobre sus compañeras.

Andonovski se ha inclinado por una línea de tres atacantes con Sophia Smith y Trinity Rodman junto a la ariete Alex Morgan.

"Intentamos dar esa energía desde el banquillo y aportar esa experiencia a sabiendas de que el día después del partido, las suplentes siempre entrenan", agregó.

"Es difícil, lloras en la ducha o con tus amigas en el sauna, y luego sales a entrenar, te rompes el trasero, te diviertes y lo aprovechas", dijo.

"Un poco de ansiedad"

Las campeonas llegan al partido final sin estar clasificadas, y no pueden perder si quieren asegurar un cupo en octavos de final.

"Las conversaciones que he tenido con Vlatko en general, son de que cuando el momento sea el adecuado y el partido está listo, yo estaré preparada", aseguró Rapinoe.

"Para nosotras, (la prioridad) ahora es Portugal. Tenemos la posibilidad de ganar el grupo y llegar a la mejor parte del torneo", apuntó.

Rapinoe confía en que sus compañeras puedan soportar la presión del partido aún cuando ella no esté en la cancha.

"Claro que hay un poco de ansiedad cuando se tiene que alcanzar un resultado. Eso es emocionante, todo el mundo lo sabe", indicó.

"Estamos emocionadas, pero insatisfechas con lo que hemos jugado y sabemos en qué podemos mejorar", sostuvo.