El día después para Paulo Dybala (30) es más dulce que nunca. El jugador de la Roma, tras el rotundo giro de 180 grados con el que decidió no aceptar la faraónica oferta de los árabes de Al-Qadsiah, volvió inmediatamente al césped de Trigoria para reanudar los entrenamientos de cara al partido contra el Empoli, mientras que en las redes sociales la ola de entusiasmo y afecto tras el anuncio de su decisión es incesante.
A las puertas del centro de entrenamiento giallorosso, varios aficionados le esperaban a él y a todo el equipo para darle las gracias de nuevo, después de que otro grupo de seguidores acudiera al domicilio del jugador en Roma para hacer sentir su presencia. Tras su compañero Paredes y muchos otros seguidores VIP en las redes sociales, la elección de Dybala también fue aplaudida por el mundo de la política. Multitud de reacciones bajo el post del número 21, lleno de corazones de sus compañeros de equipo y de muchos rostros famosos italianos.
La afición clama por el número 10 para Dybala tras el gran gesto de amor. La elección del fantasista calentó aún más el corazón de los seguidores giallorossi, que corrieron a su casa para celebrar su estancia poco después de que hiciera oficial la noticia en sus canales sociales.
La mujer no es decisiva
También hubo muchos mensajes de cariño para la mujer del argentino, Oriana Sabatini, que fue decisiva en las negociaciones, convenciendo a su marido para que rechazara la tentación saudí. La oferta de 75 millones de euros hizo dudar a Dybala, pero la fuerza de su amor por ella y por la Roma llevó al exjugador de la Juve a tomar una decisión sentida, quedándose en la Roma y haciendo vibrar a la escuadra giallorossa, que ahora sueña a lo grande.