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Joao Félix y Morata fulminan al Elche y el Atlético llegará a 2023 en zona Champions (2-0)

Denis García
Morata y Griezmann celebran el segundo gol del Atlético.
Morata y Griezmann celebran el segundo gol del Atlético.AFP
El Atlético de Madrid derrotó al Elche por 2-0 para volver a meterse en los puestos de acceso a la Champions League. No lo tuvo fácil, porque los de Machín aguantaron en la primera mitad, pero dos goles de Joao Félix y de Álvaro Morata premiaron una buena segunda mitad colchonera en un partido en el acabaron expulsados tanto Mario Hermoso por los locales como Gonzalo Verdú y Domingos Quina por los visitantes, que continúan hundidos en la tabla.

LaLiga se había detenido antes del Mundial para alivio de ambos equipos, que fueron los peores en las tres jornadas previas al parón, con un punto para los madrileños y ninguno para los ilicitanos.

Más de mes y medio sin contar con la Copa del Rey habían tenido tanto Simeone como Machín, aunque este último algo menos porque fue presentado el pasado 24 de noviembre, para estrujarse los sesos con el objetivo de dar con el cambio táctico o cualquier otra tecla que cambiara una dinámica tan negativa a la vuelta de Catar.

Simeone sorprendió de inicio copiando a su homólogo en el banquillo francés Didier Deschamps con la introducción de Antoine Griezmann (que casi sorprendió más si cabe con su peinado rosa fucsia) como centrocampista, una fórmula que dio un resultado más que óptimo en la Copa del Mundo. De este modo el galo, con su buena visión de juego, serviría de asistente de lujo viniendo desde atrás a Morata y a Joao Félix.

El Elche dejó al Atlético sin ideas en la primera parte

Esa era la idea, porque la realidad, al menos al inicio, fue que el Atlético se topó con un Elche con las ideas claras y muy bien plantado atrás, permitiendo pocas ocasiones a los colchoneros, que tuvieron solo chispazos esporádicos de sus dos delanteros, pero sin demasiado peligro. Los visitantes, que bastante tenían con tratar de mantener su portería a cero, tampoco inquietaron apenas la meta de Oblak en la primera parte, con lo que el empate sin goles era inevitable.

Aunque los primeros 45 minutos acabaron con un golpe de optimismo para los rojiblancos gracias a la expulsión de Verdú. El central agarró a Morata en una ocasión manifiesta de gol en la frontal del área, aunque tuvo que ser el VAR el que avisara al colegiado Guillermo Cuadra para que señalara la sanción disciplinaria.

A la vuelta del descanso se notó la superioridad numérica porque los de Simeone salieron en tromba a por el primer gol. Pero, paradojas del fútbol, este no llegaría hasta que el encuentro se volvió a igualar en hombres y expulsiones. Mario Hermoso, con dos tarjetas amarillas casi consecutivas, se marchó al vestuario antes de tiempo, aunque sus compañeros no tardaron ni tres minutos en vengarle.

Joao Félix y Morata se reivindican en una buena segunda mitad

Si unos momentos antes Griezmann había fallado una clara ocasión tras un gran pase de tacón de Félix, en el minuto 56 llegó lo inevitable, pero con los protagonistas invertidos. El francés le puso el balón en la cabeza al portugués, que se reivindicó tras los rumores de su posible marcha abriendo la lata para alivio de la afición del Cívitas Metropolitano.

Esto dio alas a los colchoneros, que se vieron mucho más cómodos de como habían estado en la primera parte y tuvieron más oportunidades, aunque Pere Milla estuvo a punto de estropearles la Navidad con un cabezazo que se fue rozando el palo. Para que no hubiera dudas de quién se iba a llevar los tres puntos, Morata se encargó de poner tierra de por medio en el marcador con la jugada curiosa de la noche.

El internacional español recibió un balón en la banda derecha, dejó sentado a Bigas y a Clerc y, ya dentro del área, el que habría sido un tanto de bandera acabó siendo igualmente válido, pero más feo porque el remate del ariete, tras ser rechazado por Mascarell, se elevó al cielo de Madrid para entrar llorando en la portería de Badía (todo esto con el propio Morata doliéndose en el suelo sin ver el final de su acción).

La temporada para olvidar de los franjiverdes se resumió en los instantes finales. Bigas tuvo el 2-1, pero su disparo desde el área pequeña fue atajado por Oblak. Justo después, Domingos Quina, que había entrado en el minuto 83 y le sacaron una amarilla en el 86, fue expulsado en el 90. El resumen perfecto de que las desgracias nunca vienen solas.

Y así terminó el último partido del año para ambos equipos, con el Elche todavía más hundido si cabe en la última posición con cuatro puntos de 45 posibles (a siete del Cádiz y el Sevilla, que completan la zona de descenso) y el Atlético recuperando sensaciones y, lo más importante, el objetivo de estar en puestos de Champions aprovechando el empate entre el Betis y el Athletic unas horas antes.

Jugador Flashscore del partido: Joao Félix.

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