La "Messi manía" se apodera de Pekín antes del amistoso de Argentina
Todos los ojos están sobre Lionel Messi, considerado por muchos como el mejor futbolista de todos los tiempos y quien llevó a Argentina a la gloria mundialista en diciembre en Catar.
Cientos de aficionados chinos con banderas argentinas y camisetas del rosarino se han congregado en el exterior del lujoso hotel de la selección desde que su ídolo llegó al país el sábado.
La multitud se apostó en las calles aledañas, fuertemente vigiladas, con la esperanza de poder atisbar al futbolista de 35 años cada vez que el equipo se dirigía al entrenamiento.
Aunque el astro guardó un perfil discreto, eso no restó entusiasmo a sus seguidores.
Un aficionado contó a la AFP su aventura nocturna dentro del hotel Four Seasons en un intento de encontrarse de cerca con Messi y sus compañeros.
"Primero me escondí en el cuarto del conserje, luego subí a la planta del equipo a través de la escalera de incendios", dijo este hombre apellidado Lin a la AFP.
La seguridad del hotel lo atrapó y lo interrogó antes de dejarlo marchar.
Otro fanático, Li Weihua, explicó que había tomado un avión desde su ciudad de Shenzhen, en el sur de China, solo para intentar ver a Messi en los alrededores del hotel.
Ni siquiera dispone de entrada para el partido en el estadio de los Trabajadores, cuyos 68.000 asientos se agotaron rápidamente.
"Solo quiero sentir el ambiente", dice el hombre de 29 años, que nunca antes había viajado a Pekín.
Huang Yongming, de 17 años, tuvo más suerte en conseguir una de las tan codiciadas entradas.
"Me gasté alrededor de 3.000 yuanes (419 dólares) por la entrada", dice este joven procedente de la ciudad de Changchun, en el noreste.
"Sé que es caro, pero pensé que si no aprovechaba la oportunidad, lo lamentaría", explica.
A pesar del sol abrasador, numerosos aficionados ya esperaban por la mañana ante las puertas del estadio.
El partido, una reedición de los octavos de final de Catar-2022, será el primero de Messi desde que anunció su fichaje por el Inter Miami después de dos años en el París SG.