Hay momentos de trance en los que un jugador parece disfrazarse del dios del baloncesto y se fusiona con el balón y el aro para convertir en oro todo lo que toca. 

Eso ocurrió en el encuentro entre el Gran Canaria y el Baskonia en Howard. El de New Jersey, especialmente en el segundo cuarto, entró en erupción con 18 puntos y cinco triples convertidos en sólo siete intentos. Él solito rompió el partido... y el récord de Perasovic. 

Porque acabaría el duelo en tierra insular con nueve de 12 intentos, firmando 34 puntos en los 22 minutos y 34 segundos que estuvo sobre el parquet. 

El de New Jersey superó, con esos nueve triples, los ocho triples en 10 intentos que consiguió Velimir Perasovic en 1994. Una cifra que igualó Saulius Stombergas en 2001 con mayor precisión, un 8 de 9, en la pista de Estudiantes. Y que seis años perfeccionó aún más Igor Rakocevic con un impecable 8 de 8 en el Buesa Arena. 

Solo un jugador en toda la historia de la Liga Endesa ha conseguido llegar o superar los nueve tiros de tres en menos tiempo: Thadd McFadden con un 9 de 13 en 18 minutos y 32 segundos ante el Burgos.

Y únicamente existe otro precedente en el que un jugador alcanzó esa cifra desde el 6,75 en menos de 28 minutos. Concretamente, lo superó. Jacob Pullen en el récord histórico de la Liga Endesa de 12 triples anotados en 22 minutos y 50 segundos.