Nacho, Ceballos y Asensio o cómo ganarse el sitio en el Madrid de Ancelotti
El One Man Club del Real Madrid, sin discusión alguna, es Nacho Fernández. El defensa, como siempre lo ha hecho, rinde en cualquier posición sobre el terreno de juego. Desde su rol preferido de central, al de lateral izquierdo o derecho, en el que ha debido jugar estos dos últimos partidos, ha sido vital para la remontada ante el Villarreal y la victoria en San Mamés.
"Estoy feliz por jugar y seguir sumando. Aprovecho todo lo que tengo. Estoy demostrando que cada vez que juego lo hago bien y que estoy preparado para cualquier momento. Hoy hemos ganado, así que estoy feliz por el equipo", declaró el 'defensa pesimista', como lo calificó en su día Ancelotti, tras ganar al Athletic.
Las lesiones de Carvajal y Lucas Vázquez, y la nula confianza en Odriozola, que además salía de lesión, hicieron que el técnico volviese a confiar en él, que sólo había sido titular en el primer partido de LaLiga, ante el Almería. "Venía de hacer una gran segunda parte contra el Villarreal y ayudé al equipo con una bonita remontada. El míster me pidió salir de inicio. He aportado energía y ganas y lo he demostrado en el terreno de juego. Estoy con muchas ganas y cuando me lo pida el míster estaré a su disposición para dar lo mejor de mí".
A cuatro meses de que se acabe su contrato, Nacho aún no sabe qué pasará con su futuro. Dependerá, una vez más, de las oportunidades que tenga una vez que se recuperen los lesionados. Si sigue jugando, su renovación será más sencilla.
Dani Ceballos
Ha recibido siempre elogios de Ancelotti, pero nunca le ha tratado como titular. Desde el inmovilismo del trío Casemiro, Modric-Kross, pasando por los fichajes de Camavinga y Tchouaméni, más la explosión de Valverde -aunque este juegue más en banda-, sus minutos han estado muy limitados.
Aun así, el sevillano no se ha rendido y lo ha demostrado cuando más lo necesitaba el equipo, con una segunda parte excelsa ante el Villarreal y con el premio de la titularidad en San Mamés. Un nivel que, de seguir así, le podría valer una oferta de renovación que aún no ha recibido.
"No hay club más grande que el Madrid. Me quedan cuatro meses de contrato, pero voy a darlo todo para demostrar que quiero seguir aquí", dijo Ceballos tras el triunfo ante el Athletic de Bilbao. Más claro, imposible.
Marco Asensio
Del mismo modo que Nacho y Ceballos, Asensio también vuelve a demostrar que se puede contar con él para cualquier roto o descosido. En su caso, el mal momento de Rodrygo y la necesidad de bajar al medio campo a Valverde, que tampoco anda fino, le abrieron las puertas de la titularidad de par en par. Y no las quiere cerrar, al contrario, como tampoco las de su continuidad. "La renovación no depende de mí, se lo tienes que preguntar a otra persona", declaró tras el choque de Copa.
Lo que está claro es que ofertas no le van a faltar, incluída la de un Real Madrid que, ahora sí, y después de un verano en el que intentó su traspaso, retomó las conversaciones para mantener al balear en su plantilla.