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Neymar se lesiona y abandona el campo entre lágrimas a dos semanas del partido en Múnich

Denis García
El momento de la lesión de Neymar.
El momento de la lesión de Neymar.AFP
El jugador brasileño del Paris Saint Germain sufrió un fuerte esguince en su tobillo derecho por el que tuvo que ser sacado del terreno de juego en camilla en la victoria de su equipo de este domingo ante el Lille por 4-3 en el Parque de los Príncipes.

Una vez más, una lesión de tobillo puede dejar a Neymar (31) en la estacada en uno de los momentos más cruciales de la temporada. Corría el minuto dos de la segunda mitad del encuentro correspondiente a la jornada 24 de la Ligue 1 cuando, con 2-1 en el marcador, una disputa de balón en el centro del campo con el capitán del Lille, Benjamin André, hizo que al brasileño, al apoyar el pie, se le torciera el tobillo derecho. 

El ex del Barcelona, que estaba jugando bien y había anotado un gol y dado una asistencia a Mbappé en la primera parte, tuvo que ser atendido con claros gestos de dolor mientras lloraba y fue evacuado del terreno de juego en camilla, dando entrada a Hugo Ekitiké. 

Los parisinos, que salvaron una situación más que comprometida puesto que perdían por 2-3 hasta que el propio Mbappé empató en el minuto 87 y Messi, de falta directa, marcó el gol de la victoria en el 94, podrían perder a uno de los integrantes de su tridente ofensivo de cara al crucial partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League contra el Bayern Múnich, que se disputará el próximo 8 de marzo.

Un historial de lesiones preocupante

Los problemas de Neymar con los esguinces, entre otros muchos tipos de percances físicos, vienen de lejos. El último ejemplo se vio en el Mundial de Catar, donde se perdió dos partidos de la fase de grupos por esta misma lesión producida en el partido inaugural ante Serbia.

Mucho peor, y los seguidores del PSG no querrán que este caso sea similar, fue el esguince que sufrió el 28 de noviembre de 2021 en el encuentro de liga contra el Saint-Étienne, que le mantuvo de baja durante 73 días en los que no pudo jugar 12 partidos con los galos.