Santiago de Chile, un antes y un después para la dupla Triay-Fernández
Gemma Triay (31) y Claudia Fernández (18) estaban haciendo méritos para vencer en la ansiada final. Ya habían participado en otras dos antes, una de ellas la del Major de Catar, pero aún no conseguían alcanzar la determinación de Bea González-Delfi Brea y Paula Josemaría-Ari Sánchez. Por el camino, Claudia Jenssen y Jessica Castelló ganaron de forma sorprendente en México y rompieron esa dinámica con sólo cuatro protagonistas. Ahora, ya son ocho campeonas en lo que va de año.
La pronta eliminación de las Superpibas, que ya ponen el foco en "resetear" tras unos meses muy intensos y a un nivel bastante elevado, hizo que el camino se despejara desde bien temprano. El gran reto, sin embargo, llegó en la ronda de semifinales, donde se vieron las caras con Ari y Paula en un duelo que ganaron por la vía rápida (7-6 y 6-2). Y esa victoria resultó un impulso de cara al ilusionante examen del lunes.
El hecho de que Triay y Fernández se colaran en el partido definitivo tampoco resultaba ninguna sorpresa: ya habían avisado y las sensaciones eran de lo más positivas. Sin embargo, no muchas voces autorizadas esperaban a Lucía Sainz y Patty Llaguno, quienes tuvieron un cuadro relativamente asequible (derrotaron en semis a Andrea Ustero y Alejandra Alonso por 7-6 y 6-1). En la pugna por el oro, en cambio, no gozaron de muchas opciones (6-1 y 6-4).
En la categoría masculina, el pulso entre Fede Chingotto-Ale Galán y Agustín Tapia-Arturo Coello sigue su curso. Una vez más, ambas duplas se vieron las caras, como se espera que ocurra en infinidad de ocasiones a lo largo de 2024, en un duelo que llegó hasta el tercer set después del 6-0 inicial para los números uno y el igualado 4-6 en el segundo. Luego, Tapia y Coello impusieron su ley por 6-4 y frenaron el ademán de remontada.