La ex número uno del mundo de tenis femenino, de 43 años, dijo en un vídeo de Tik Tok que en mayo se encontró un bulto en el lado derecho del cuello y una resonancia magnética mostró que tenía un quiste braquial.
"Sigo recuperándome, pero cada vez mejor. La salud siempre es lo primero", publicó Williams en X.
A Williams no le extirparon el quiste inmediatamente, pero después de que aumentara de tamaño y le hicieran múltiples pruebas y una biopsia, se sometió a una cirugía para extirparlo.
"Me encontré una gran masa en el cuello. Me mortificaba", dice en el vídeo. "Me hicieron pruebas. Todo lo que te puedas imaginar. Todo dio negativo. Resultó que tenía lo que llaman un quiste, un quiste braquial para ser exactos.
"Así que al final me lo tuvieron que extirpar. Era muy grande. Tenía el tamaño de un pomelo y dolía un poco al salir".
"Tuvieron que ponerme un drenaje porque era demasiado, pero todo salió bien y me siento muy feliz de haber trabajado con unos médicos estupendos".
"Estoy un poco asustada, pero emocionada por dar los siguientes pasos para curarme y recuperarme".
El final de su vídeo mostraba a Williams con su hija Olympia en un prometido viaje de compras tras la operación.
"Me siento muy agradecida y afortunada de que todo haya salido bien y, sobre todo, de que esté sana", escribió Williams en un pie de foto del vídeo. "Aún así llegué a American Doll con Olympia como había prometido.
"Y sí todo está bien".
Williams ganó su primer título de Grand Slam en el US Open de 1999 y el último en el Open de Australia de 2017.
Ella capturó siete Open de Australia, siete Wimbledons, seis US Open y tres títulos del Abierto de Francia antes de retirarse después del US Open 2022.