Tras una victoria no muy convincente ante Etcheverry para comenzar su torneo romano, el partido del domingo iba a dar una indicación más precisa del estado de forma de Novak Djokovic. El serbio se enfrentaba a un rival de toda la vida, Grigor Dimitrov, siempre difícil de manejar.
Pese a la insistencia de Dimitrov, "Nole" fue dominante. El primer set lo gestionó bien, aunque estaba claro que no se trataba del mejor Djokovic. Sin embargo, sólido en los puntos importantes, logró mantener una clara ventaja sobre el búlgaro.
Se llevó el primer set por 6-3, y luego siguió con el mismo ritmo, rompiendo rápidamente a un errático Dimitrov . Novak Djokovic gana por un set y un break, ¿qué puede pasar? Normalmente, es sencillo. Pero por alguna razón, el serbio disminuyó su rendimiento y se vio sorprendido.
Entre la frustración por los anuncios en su contra y un bajón en su rendimiento físico, el serbio se hundió y Grigor Dimitrov entró en escena. El búlgaro, que perdía por 4-2, ganó cuatro juegos seguidos , siendo sólido en el intercambio y generando frustración en el serbio, ulcerado por una pista mal preparada, según él.
Quizás, eso fue lo que necesitó Djokovic para volver a conectarse. El serbio marchó hacia el tercer set, echando por tierra rápidamente cualquier esperanza de remontada búlgara con su nueva agresividad y control. Novak Djokovic se impuso por 6-3, 4-6 y 6-1 y accedió a la siguiente ronda.