Vergüenza en Argentina, el Boca - Racing termina antes de tiempo con 10 expulsados

Publicidad
Publicidad

Vergüenza en Argentina, el Boca - Racing termina antes de tiempo con 10 expulsados

Noticias
Los jugadores de Racing levantan el Trofeo de Campeones.
Los jugadores de Racing levantan el Trofeo de Campeones.AFP
Racing Club alzó el Trofeo de Campeones argentino tras derrotar a Boca Juniors en un choque marcado por las expulsiones. El árbitro se vio obligado a dar por concluido el partido dos minutos antes del final porque los xeneizes se quedaron con menos de siete jugadores.

Tras 90 minutos de máxima igualdad, el encuentro enfiló el tiempo suplementario y ahí comenzó el despropósito. En el 94’, cada uno de los equipos se quedó con 10 jugadores por las tarjetas rojas de Sebastián Villa (26) por parte de Boca y Johan Carbonero (23) en Racing.

Ya en la prórroga, continuó la debacle. A los 100 minutos de juego, Alan Varela (21) vio su segunda amarilla y los campeones de liga vieron cómo su número de efectivos descendía a nueve. Fue el principio del fin.

En el 118’, Carlos Alcaraz (19) adelantó a Racing y todo explotó. En los siguientes 12 minutos dos jugadores más del cuadro de Avellaneda enfilaron el túnel de vestuarios antes de tiempo y otros cinco xeneizes hicieron lo propio, concluyendo con Benedetto (32) en el 130’, que dejó a su equipo con menos de siete jugadores y le impidió pelear hasta el final por forzar la tanda de penaltis.

Estos sucesos vuelven a poner en evidencia al fútbol argentino, en el que muchas veces se traspasa la línea de lo meramente deportivo. En ocasiones los problemas suceden fuera del terreno de juego, como en la final de la Copa Libertadores 2018, que terminó decidiéndose en el Santiago Bernabéu, y otras, como esta última, son los futbolistas los que traspasan los límites.

Sospechoso habitual

No es la primera vez que Boca Juniors protagoniza una de las páginas negras de la historia del fútbol sudamericano. En 1971, formaron parte del considerado como partido más violento de la historia.

El partido se disputó el 17 de marzo con motivo de la fase de grupos de la copa libertadores y los argentinos tuvieron como rivales a los peruanos del Sporting Cristal. El primer puesto del grupo para pasar a la siguiente ronda estaba en juego y la cosa terminó de la peor manera. Una batalla campal sin parangón se saldó con 19 expulsados.

Solo los porteros de cada uno de los conjuntos, Sánchez y Rubiños, y el xeneize Meléndez, que no participó en los hechos, se libraron de ser sancionados. No hubo miramientos, tres de los partícipes en la pelea fueron al hospital y el resto, incluidos árbitros y entrenadores, visitaron la Comisaría 24.

¿Pasión o irracionalidad?

Normalmente se dice que donde más se vive el fútbol es en el continente sudamericano. Se dejan el alma por el equipo y las rivalidades alcanzan un grado de intensidad muchas veces difícil de controlar y asumir.

Eso provoca que noticias como la del Boca - Racing casi siempre suelan llegar desde allí. Recientemente, en Brasil, sucedió algo similar. El curiosamente llamado ‘derbi de la paz’ entre Vitória y Bahía terminó en 2018 en una guerra sin cuartel. El colegiado también se vio obligado a dar por concluida la contienda antes del fin del tiempo reglamentario porque un equipo se quedó sin efectivos para continuar.